Aguas en el oído: soluciones para sacarlas

Cuando vamos a la piscina, playa o incluso ducharnos, es común que el agua se nos meta en los oídos. Aunque no es un problema grave, sí puede ser incómodo y molesto. Por eso, en este artículo te daremos algunas soluciones para sacar el agua de los oídos.

¿Por qué se nos mete agua en los oídos?

Antes de hablar sobre cómo sacar el agua de los oídos, es importante entender por qué se nos mete agua en ellos. Los oídos tienen una estructura en forma de tubo llamada "trompa de Eustaquio" que conecta el oído medio con la garganta. Esta trompa ayuda a mantener la presión en el oído y drena el líquido que se produce en el oído medio.

Cuando nos sumergimos en el agua, la presión del agua puede hacer que entre agua en la trompa de Eustaquio. Además, si tenemos cera en los oídos, la entrada de agua puede hacer que se expanda y bloquee el canal auditivo.

¿Qué podemos hacer para sacar el agua de los oídos?

A continuación, te presentamos algunas soluciones para sacar el agua de los oídos:

1. Inclina la cabeza hacia el lado afectado

Si tienes agua en un solo oído, inclina la cabeza hacia el lado afectado y salta sobre un pie varias veces. Esto puede ayudar a que el agua salga del oído. Si no te sientes cómodo saltando sobre un pie, también puedes inclinar la cabeza y moverla de lado a lado.

2. Usa una toalla

Otra opción es inclinar la cabeza hacia el lado afectado y colocar una toalla en el oído para absorber el agua. Asegúrate de que la toalla no esté demasiado apretada para evitar dañar el tímpano.

3. Usa un secador de pelo

Si tienes agua en ambos oídos, inclina la cabeza hacia un lado y usa un secador de pelo en modo frío. Mantén el secador a unos 30 centímetros de distancia del oído y mueve el aire hacia el oído para secar el agua.

4. Usa gotas para los oídos

Existen gotas para los oídos que pueden ayudar a secar el agua. Estas gotas contienen alcohol isopropílico, que ayuda a evaporar el agua del oído. Sin embargo, es importante no usar estas gotas si tienes una herida en el oído o si has tenido una cirugía de oído reciente.

5. Usa un enjuague de agua y vinagre

Mezcla una parte de agua y una parte de vinagre blanco y usa una jeringa para aplicar la mezcla en el oído. Inclina la cabeza hacia el lado afectado y deja que la mezcla repose en el oído durante unos minutos. Luego, inclina la cabeza hacia el lado contrario para que el líquido salga del oído.

¿Cuándo debo consultar a un médico?

En la mayoría de los casos, el agua en los oídos no es un problema grave y se puede solucionar con las soluciones mencionadas anteriormente. Sin embargo, hay algunos casos en los que debes consultar a un médico:

- Si el agua no sale del oído después de unos días.
- Si tienes dolor de oído o pérdida de audición.
- Si tienes fiebre o síntomas de infección.

Conclusión

La entrada de agua en los oídos puede ser incómoda y molesta, pero hay soluciones sencillas para sacar el agua de los oídos. Si tienes agua en los oídos, prueba inclinar la cabeza hacia el lado afectado, usar una toalla, un secador de pelo, gotas para los oídos o un enjuague de agua y vinagre. Si tienes síntomas graves o el agua no sale del oído, consulta a un médico.

Preguntas frecuentes

1. ¿Es peligroso tener agua en los oídos?

No es peligroso tener agua en los oídos, pero puede ser incómodo y molesto.

2. ¿Puedo usar bastoncillos para sacar el agua de los oídos?

No es recomendable usar bastoncillos para sacar el agua de los oídos, ya que puede empujar el agua más adentro del oído o dañar el tímpano.

3. ¿Puedo nadar con agua en los oídos?

Sí, puedes nadar con agua en los oídos, pero es recomendable usar tapones para los oídos para evitar que entre más agua.

4. ¿Cómo puedo prevenir que entre agua en los oídos?

Para prevenir que entre agua en los oídos, puedes usar tapones para los oídos, evitar sumergir la cabeza en el agua y secar los oídos después de bañarte o nadar.

5. ¿Qué debo hacer si tengo una infección de oído?

Si tienes una infección de oído, debes consultar a un médico para recibir tratamiento. Los síntomas de una infección de oído incluyen dolor de oído, fiebre y pérdida de audición.